Depende del estado inicial de tu piel y del objetivo que tengamos. En promedio, se recomiendan entre 3 y 5 sesiones, espaciadas por varias semanas. Sin embargo, desde la primera sesión notarás cambios progresivos como mejora en la textura, tono y luminosidad de la piel.

Depende del tipo de láser utilizado (ablativo o no ablativo). Si usamos láser ablativo, podrías tener enrojecimiento, descamación o inflamación leve por 5 a 10 días. Con láser no ablativo, la recuperación es mucho más rápida: 1 a 3 días de enrojecimiento leve.

Antes del procedimiento: Evita el sol intenso por al menos 2 semanas. Suspende el uso de retinoides o ácidos exfoliantes 3 a 5 días antes. Después del procedimiento: Usa protector solar todos los días. Hidrata tu piel frecuentemente. Evita sol directo, piscinas y saunas durante la primera semana. Sigue todas las indicaciones que te entregaremos después del tratamiento

El láser CO₂ es muy versátil, pero la evaluación médica es fundamental. Algunas pieles muy oscuras o con condiciones particulares pueden requerir protocolos específicos o alternativas. Por eso, agendamos siempre una valoración personalizada antes de iniciar cualquier procedimiento.

La mayoría de los pacientes describen la sensación como un calor intenso o pequeños pinchazos, pero aplicamos anestesia tópica antes del procedimiento para que sea mucho más tolerable. Además, ajustamos la potencia del láser según tu tipo de piel y sensibilidad.